Siempre me ha gustado la cocina de 99 SUSHI BAR de Madrid. Suelo ir al de la calle Hermosilla ya que el de la Moraleja no me suele coger de paso. Hay otro en la calle Ponzano. Ya se está convirtiendo en una cadena…Pero esta vez me apetecía probar el nuevo 99 Sushi Bar del hotel Eurobuilding, justo donde se ha instalado también el nuevo DiverXo. El éxito de está empresa reposa en gran parte en la actuación directiva y coordinadora de Mónica Fernández pero también del cocinero encargado de toda la cocina fría y entrantes , David Arauz. También conviene recordar que ha sido en este 99 Sushi Bar donde empezó Luis Arévalo (ahora en Kena). Ese lunes pasado David estaba en la Moraleja, pero sí estaba presente Ricardo Limas que ha sido fichado para reforzar la carta de platos calientes.
Seré reiterativo pero repetiré hasta la saciedad que el abuso de los sabores dulces en la cocina salada perjudica enormemente el paladar, no solamente en la apreciación del plato en sí ( un exceso de sal o de azúcar uniformiza los matices gustativos de los alimentos), sino también en el desarrollo y la evolución del menú. Se llega al postre con la sensación que el paladar en particular y el cuerpo en general han obtenido de sobra la “dosis” de azúcar que necesitaban. El resultado del otro día no pudo ser más elocuente: nadie tomó postre.
Luego entraremos en el detalle de los platos.
Empezamos con una vieira con huevas de abadejo y puré de ciruela ácida. Un poco sosa pero con buen punto de cocción.
Seguimos con lo que fue lo mejor de la cena: patas de cangrejo real gratinadas al wasabi y yuzu. Un punto subido pero estimulante del rábano picante.
Buen sashimi de lomo de atún y salmón. Más graso y sabroso el de salmón.
Excelente toro con tomate ecológico. Unas migas crujientes y nos recordaría el “pan con tomate” de Kabuki (ver post)
Excelente como siempre el plato estrella de la casa : langostinos en tempura con una salsa de kimchi.
Niguiris de salmón y de sardina y jengibre. Bueno el de salmón pero un poco más soso el segundo.
Luego llegaron los dos platos calientes. Wagyu de chile (que no se puede anunciar como “Kobe”) con salsa de galanga y brandy muy dulzona. Anulaba la carne. Yuca frita.
Pichón, que se nos recomendó insistentemente como “plato imprescindible”: muslitos algo correosos. La pechuga servida encima de una calabaza hiper dulzona.
99 SUSHI BAR
Hotel EuroBuilding
c/Padre Damián nº 23
91 359 38 01
Cerrado domingo noche
(No hay precios. Invitado por mis acompañantes).