La última pequeña “follia”
de Josep María Baixas
Uno de los restaurantes más bonitos de España se encuentra en Sant Joan Despí a sólo cinco kilómetros de Barcelona.
Es el Follia (“Locura” en catalán antiguo) de Josep María Baixas. Para los que están fuera de Cataluña, igual no les suena este nombre pero Josep María, “Jo”, para los amigos, pertenece a la familia Baixas que regenta la famosa pastelería de la calle Muntaner.
Cuando conocí a Josep María , hace casi 20 años en el grupo barcelonés “Joves Amants de la Cuina” (Alex Montiel, Sergi Arola, Toni Massanés…) sólo regentaba el restaurante familiar El Balancí (que aun existe), aunque sus aspiraciones iban encaminadas a crear un lugar donde pudiera expresarse mejor. Cocinero esteta, arquitecto frustrado, tuvo que tardar muchos años más en realizar su sueño
y en diseñar, a partir de las paredes de una antigua masía, un espacio de una gran belleza
con un comedor acristalado con vista al huerto. Hierbas aromáticas, algunas verduras y algo de viñedo que empieza a producir algunos litros de merlot es hoy por hoy el embrión de un proyecto de huerto más ambicioso. Excelente iniciativa…
Un día espero escribir un post sobre el restaurante “gastronómico”, ya que hace ya unos años que no lo visito.
Pero hoy “toca” hablar del nuevo “Gastrobar” que acaba justo de abrir en los sótanos del restaurante. Jo me cuenta que esta vez lo ha hecho todo él. Desde el diseño hasta la obra misma. Como en la parte de arriba, impera el buen gusto.
Plancha, 
bodega 
Paco Alcobendas, el sommelier del Follia
Imaginación para capear el temporal…
La cocina es sencilla como no podía ser de otra manera en este tipo de “bistrot” pero muy bien pensada. Va desde los montaditos “a lo Quimet i Quimet” hasta platillos bien guisados que podrían recordar los de Els Tres Porquets.
Sobrasada picante con bacalao ahumado(Carpier) y cabello de ángel, 
salmón ahumado (Carpier) con huevas de arenque y alcachofas de El Prat , confitadas pero crocantes,
rollitos de beicon con txangurro y piquillo(3 €), sardinillas en aceite con cebolla confitada y tomate seco, 
pinchitos de chistorra, butifarra negra y salchicha, con parmesano(2 €) y wagyu con berenjena (5 €). Todos riquísimos. Una pena que se utilice prácticamente para todos bollitos de pan deshidratados. Se encuentra a faltar una buena coca.
Curiosa (y buena) la versión de las patatas bravas. Se trata realmente de daditos de patata rösti ( o paillasson) acabadas en salamandra. Una nueva textura. Sugiero un golpe de plancha, al menos de un lado para darle algo de crujiente en la parte de arriba.
Tampoco desmerecen los guisitos (entre 6 y 10 €). 
Buenos los callos con garbanzos , poco caldosos y algo falto de picante
y realmente deliciosas las albondiguillas con shiitakes. El mejor plato, de largo.
Muy bueno también el civet de jabalí, de sabores potentes pero elegantes a la vez.
Golosas las costillas de cerdo en su salsa agridulce. Sólo sugiero que se sirvan con un poco de arroz blanco, un basmati por ejemplo, para que puedan empaparse de la salsa, espectacular de concentración. Sería una pena que se quedara en el fondo del cuenco.
Estas costillas, como algunos otros productos, forman parte de una línea de conservas y confituras caseras que Baixas prepara para que los clientes se las puedan llevar.
Para terminar la comida, selección de tartas de elaboración propia.
Muy buena la manzana de la tatin, bien compotada , aunque pediría un poco más de protagonismo a la masa.
Gran surtido de vinos a la copa y de cervezas.
Quise probar una cerveza tostada artesana elaborada en Rubí , la premiada Bleder “Fòc de drac” (fuego de dragón). Hay vida más allá de la Inedit…
FOLLIA De Pot
c/ Creu de Muntaner, 17.
Sant Joan Despí (Barcelona).
Cerrado sólo los domingos. Semana Santa y 3 semanas en agosto.
http://www.follia.com/
Tienes razón. Sería muy interesante hablar de todos estos menú. Pero antes de hablar tendría que degustarlos todos(o muchos)…. Y ya lo ves, me será casí imposible.. El nuevo MOO?
el de la calle provença, Mon se llama, me dejo un mal sabor de boca a mi particularmente.
ah Mon, vale.
Aun no he ido, pero me interesa ya que es un discípulo de Jean Luc Figueras, creo.