Conocí hace unos 6 años la cocina de Carlota Claver en el restaurante Alba Granados.
Desde hace casi un año, ha dejado la empresa familiar para emprender , a sus 38 años, su proyecto más personal que es La Gormanda , en el que expresa con más libertad la cocina que desea hacer.
Ya me gustó lo que hacía entonces y me sigue gustando aun más lo que hace ahora en este antiguo colmado de un chaflán del Eixample barcelonés.
Nos hizo un menú degustación tal vez un poco diferente del que suele proponer al precio de 50 €, aunque reconoce que lo suele cambiar casi cada día.
Los mediodías se ofrece también un menú a 21 €.
Tanto
la coca de aceite con ventresca de bonito y mahonesa de miso
como
el churro salado relleno de crema de setas y salpicado de parmesano y trufa
(no creo que fuera melanosporum como me lo dijo el camarero)
y la deliciosa
cococha con su pil pil encima de una piel de bacalao crujiente
conformaron unos excelentes aperitivos. Pero los serviría todos juntos, para no alargar la espera entre bocado y bocado.
Estupendo
el tártar de tomate fresco con alcaparra y secallona con una dentelle crujiente de masa de aceite y trozos de anguila ahumada, dados de mi-cuit y crema de aguacate
Un plato que podría parecer algo recargado pero que funcionaba a la perfección. De lo mejor del menú (facturado solo 11€ en la carta!).
Toque viajero en la forma pero sabor de cocina catalana en el fondo con
las gyozas de “carn d’olla”
(¿por qué no llamarlas “crestas”?) untadas con un sabroso jugo de miso y jengibre. Riquísimas!
También me encantó
el calamar a la brasa
perfectamente asado, con su “contorno” de
daditos de manzana y butifarra negra y jugo de pollo
Aquí el ligero toque dulce de la manzana estaba bien equilibrado con la fuerza pimentada del embutido. Tímido toque de acedera en juliana que podría estar más pronunciado. Excelente plato que no vi en la carta pero animo a que se incluya, ya que estamos en temporada de calamares.
Ricas también las
manitas de cerdos con un salteado de judías de Santa Pau y sofrito
El puré de boniato y zanahoria
no aportaba gran cosa a parte de su inoportuno dulzor.
Canelón de pato
La pasta un poco pasada pero estaba muy rico y era muy agradable encontrarse los trozos enteros de la carne. En cambio no estoy muy a favor de rallar foie-gras por encima. No se aprecia y el producto se puede oxidar.
Un poco más flojo los postres, aunque Carlota, como buena ex alumna de Mey Hoffman domina muy bien la pastelería.
Streusel de espuma de mango y pasión
¿ Porqué no hacer este postre con higos, ya que es temporada? Solo llevaba un trocito como decorativo.
Bizcocho de té verde con chocolate blanco
Le sobraba el aroma artificial de pasta de trufa.
Me quedé con las ganas de probar el arroz de calamarcitos de la carta. Los jueves se suele hacer un arroz de galeras.
En resumen: una cocina sabrosa a pesar de un pequeño exceso de ingredientes en algunos platos, y un restaurante agradable, con su terraza y su parte superior que da a un balcón. Recomendable!
Servicio muy eficiente y simpático por parte del camarero Esteban Galán (a pesar de no tener vinos tintos de los que me gustan…). Se nota que disfruta haciendo su trabajo.
LA GORMANDA
c/ Aribau nº 160
93 127 60 49
Barcelona
Cierra domingo noche y lunes