TABERNAS (III)
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Seguimos hablando de “tabernas” pero esta vez pasa algo curioso. Frente a la “tabernización” de la gastronomía barcelonesa, La Taberna del Clínic , que los hermanos Simoes (Antonio y Manuel) fundaron en el 2006, justamente con este nombre “taberna” que no estaba entonces tan de moda como ahora, acaban de emprender un camino inverso.
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Con la ampliación de la cocina, el acondicionamiento de una nueva ala izquierda con sus elegantes privados y confortables sillas y la reforma completa de los baños, la llamada Taverna del Clínic ya tiene poco de “tabernícola”. Es cierto que conserva su barra, eso sí, con muy confortables taburetes con respaldo. También hay que decir que los precios no han subido con este cambio de look de la casa: la carta mantiene sus platos de siempre de cocina popular moderna a precios muy razonables, pero ahora se ha querido ampliar la oferta con un par de menús-degustación que pretenden dar un paso adelante al nivel gastronómico. Me explica Antonio Simoes las dificultades a las cuales se tenía que enfrentar por culpa de las instalaciones anteriores. Ahora, con la espaciosa cocina, se encuentra con un Ferrari entre las manos y con muchas ganas de soltarse y de progresar.
De ahí esta apuesta valiente, arriesgada, casi diría a contracorriente, de estos dos menús de 70 € y 110€ (con posibilidades de maridajes), en un momento en el que los grandes cocineros de este país ofrecen cada vez más propuestas low cost e informalidad gastronómica.
Probé el menú más corto, al que se añadió algún aperitivo más, y el plato de patatas bravas “arolianas”.
Sin más preámbulos, se empezó con un tartar de ostra normanda, apenas escaldada, con caldo dashi, nori, ajo negro y huevas de tobiko. Mucho umami. Tal vez le faltaba un matiz acidulado.
Ensalada de judías verdes y navajas, con caviar iraní. La vaina bien crocante, pero tal vez faltaba un poco de vivacidad al aliño. El caviar no conseguía por sí sólo aportar sabor.
Mucho más conseguido el tartar de bogavante con brunoise de champiñones y sorbete de albahaca y cítricos. Muy buen equilibrio de sabores.
Buena también la ventresca de atún de Balfegó, con salsa de miso, jalapeño (poco picante), Kalamata y alcaparra crujiente. Se trataría de reequilibrar el plato: reducir el la cantidad de miso, por ejemplo.
Dot (tipo de mero) con boletus al balsámico (demasiado dulzones) y hojas de mostaza.
Delicioso salteado de pulpitos, papada confitada y perrechicos. Uno de los mejores platos del menú. Muy en la línea de la cocina de Santi Santamaría, un cocinero que marcó mucho la formación de Antonio aunque su estancia en Can Fabes no durara más de un año, en la época de Javier Torres como jefe de cocina.
Bien ejecutado también el cabrito relleno de mollejas acompañado con los últimos guisantes del Maresme y patatas risoladas.
Sorbete de limón con lima kafir, streusel y menta.
Bizcocho ( tenía más una textura de galleta) de almendra, crema de limón, cerezas bio y helado de pistacho. Este detalles de las cerezas bio me hace recordar que , al menos hasta hace poco, Xavier Pellicer colaboraba con esta casa.
Espectacular barra de quesos
Manuel ha sido nombrado Caballero de la Champagne y Embajador de esta marca.
TAVERNA DEL CLÍNIC
C/ Rosselló nº 155
93 410 42 21
Cerrado los domingos.
TUITER: @PhilippeRegol
Por cierto, nadie me habló de un supuesto asesoramiento a la Taverna por parte de Xavier Pellicer. Se reconoce en algunos platos un estilo Pellicer o Can Fabes. ¿Alguien sabe algo?
En la página web se indica que Antonio Simoes aprendió en Can Fabes, quizá de ahí venga esa influencia. Por cierto, indicas que los precios son “muy razonables” (sic) y ¡hombre¡, sin entrar en profundidad en el significado del término “razonable”, yo diría que esta taberna luce unos precios bastante elevados. Menús de 70 (corto) 110 euros (largo) no son moco de pavo y en la carta hay precios que asustan, especialmente teniendo en cuenta que las raciones son pequeñas. No pretendo ahuyentar a tus lectores pero creo que deben saber que, aunque se come fenomenal, la cosa cruje de verdad.
En la carta, he visto que se siguen manteniendo los precios “razonables” de muchos platillos y tapas. Lo que sí sorprende son los precios de estos dos menús-degustación. Muy elevados por los tiempos que corren, más propios de un restaurante con estrella(s) michelín.
supuestamente uvo una oferta a Xavier Pellicer peró este último pedía cifras que subidas de zeros.
Esto será muy probable. No tendría sentido, creo. Toni tiene que hacer lo que sabe hacer y ya irá progresando solo.
No hace mucho, en otoño, el Pelli me mostro una liebre a la royal que estaba destinada a unas pruebas para la Taberna del Clinic…. Igual, despues no se entendieron. No se.
Si. Hace unos meses Pellicer contestaba siempre a la pregunta : “Ahora qué estás haciendo?” que colaboraba con la Taverna. Pero el dossier de prensa no se habla de este tema y yo mismo, me olvidé de preguntárselo a los hermanos Simoes.
Me han comentado que para entrar en el nuevo local tiene que ser con menu es correcto ?
Estuve la semana pasada y en el local de siempre comimos a la carta como ha sido habitual
pero me gustaria comer en el comedor nuevo
por eso la pregunta comedor nuevo solo menu no carta ?
Por cierto como siempre fenomenal . Los quesos sin palabras
Creo que solo menú en los 2 privados…