CARME RUSCALLEDA (leer Cristina Jolonch en La Vanguardia) se instalará dentro de unos meses en el Hotel Mandarín, en el Paseo de Gracia de Barcelona. Han sido años de incertidumbre respeto al posible inquilino barcelonés de esta prestigiosa cadena hotelera. Hace ya unos años se llegó a hablar, entre otros, de Alain Ducasse, luego de Ramón Freixa (que acaba de instalarse en el Hilton de Melbourne) y de Miquel Sánchez Romera (a punto este último de estrenar restaurante en Nueva York). Al final será la cocinera de Sant Pol de Mar quien dé este salto algo arriesgado en estos momentos económicos en que vivimos. Toda la oferta gastronómica de la ciudad condal, muy superior a lo que el mercado pueda absorber, no se podrá sostener en los próximos años. Los grandes cocineros de nuestro país sucumben a la tentación de instalarse en la capital. Empezaron los hermanos Roca en el hotel Moo y Sergi Arola en el hotel Arts y les siguieron Martín Berasategui en Condes de Barcelona, Santi Santamaría en el Hesperia de L’Hospitalet y Paco Pérez también en el Arts. Ahora llega la señora del Sant Pau. Subsistirán los mejores, los más fuertes al nivel empresarial o los más aupados…
HOLA, LA VERDAD ES QUE LA HISTORIA DE MANDARIN HA LLEVADO «CULEBRON», EN REALIDAD SE HABLO PRIMERO DE ALAIN DUCASSE, ME IMAGINO QUE DEBIA SALIR BASTANTE CARO… ENTONCES SE PUSIERON A BUSCAR «CATALANES», EN REALIDAD SE QUE HAN REVUELTO TODA CATALUÑA PARA ENCONTRAR UN CHEF PARA EL RESTAURANTE GASTRONOMICO. POR CIERTO RAMON FREIXA ABRE EN MADRID EN EL NUEVO HOTEL DE LA CADENA SELENZA CREO YO. LO DE RUSCALLEDA DE METER A SU HIJO AHI DENTRO… YA VEREMOS COMO ACABA EL CUENTO.