Han pasado ya 4 años desde que Armando Álvarez, un venezolano afincado en Barcelona y antiguo colaborador (tanto en la sala como en la cocina) de Albert Ventura del Coure, abriera sus puertas en un pequeño local del barrio de Gracia.
En su exigua cocina Armando realizaba auténticos milagros culinarios, pero la incomodidad era tal que le ha llevado a ocupar un nuevo espacio en el que las instalaciones de cocina (a la vista y con perfecta aspiración de humo) están ya a la altura. Un lugar en el que el cocinero se pasa, por lo que me dice, 15 horas al día (ajeno, por cierto, a los ajetreos de tuiter o de la prensa) tiene que ser agradable. Y el nuevo Capet , abierto desde hace 3 meses, ocupa un espacio muy acogedor: el del antiguo Cometa Pla, en el que comí bastante bien el año pasado , oficiando allí el cocinero italiano Giuseppe Padula. Pero el grupo Pla lo traspasó y Armando saltó sobre la ocasión. Se encuentra en una callejuela poco transitada del Barrio Gótico, a 100m detrás del Ayuntamiento, a 20m del Carrer Ciutat.
Pero Armando aun mantiene, con la ayuda de Izequiel, su hermano pequeño y de su antiguo brazo derecho, el Petit Capet de Gracia.
Un martes a la noche de agosto, el nuevo Capet del Carrer Cometa estaba bastante tranquilo. Nos quejamos de que todo cierra en agosto : pues es la ocasión perfecta para conocer estos locales que han decidido seguir ofreciendo sus servicios en pleno verano barcelonés. Este año ha sido duro para los pequeños restauradores y hay que estar al pie del cañón, aunque no siempre con la presencia física del cocinero-propietario en los fogones…
Armando sí que estaba: dos en cocina y Núria Soler, su socia, en la sala, no da para hacer muchos turnos de fiesta.
Hice el menú degustación de 50€ (hay otro de 35€ para mesas grandes del altillo y , a partir de septiembre un menú de mediodía a 22€)
La ostra de La Rochelle con un jugo de escabeche
(Imagino que serán las ostras de Marennes-Oléron). Este jugo es solo un ligero aliño. Casi una ostra al natural.
Me encantó el plato de
sardinas marinadas, aguacate y crema de ortiguillas, hebras de eneldo
Pedí cuchara para poder disfrutar de la deliciosa crema.
Excelente también
el tártar de tomate con anguila ahumada, albahaca y un suave jugo de cilantro
Ricard Camarena le hubiera puesto cuatro pequeños picatostes encima…y yo también.
Volví a pedir cuchara para recoger el jugo de cilantro que se iba a perder en el fondo del plato.
Berenjena asada con crema de pimiento escalibado, anchoa, cebolla encurtida y té ahumado
Un muy buen bocado. Faltaba un poco de sal en la berenjena. La anchoa por sí sola no conseguía salar todo el conjunto.
Casi pido cuchara también para este plato, pero desistí.
Rape con pak choi salteado a la donostiarra
Me gustó la idea de la donostiarra pero encontré la guarnición demasiado “dietética” para un pescado que ya también lo es… El delicioso pesto de espinacas que llegué a probar de otro plato de Armando podría ser un punto de partida interesante para este rape.
Quise probar
la croqueta de pollo con kimchi
Muy rica aunque poco picante, matiz que Armando usa con demasiada parsimonia en todos sus platos. La pondría fija en el menú degustación. Hay que “encanallar” los menús y las cartas con croquetas bien hechas , ensaladillas ricas y originales, sabores potentes… Todo no puede ser suave “fine-dinning”, el turista quiere comer también informalidad de calidad.
Costilla de cerdo con pepino encurtido, endivia braseada y berros
Fresas con nata flambleadas al Grand Marnier
Un postre tibio, un poco de invierno pero rico y sin mucha complicación.
Vinos naturales.
CAPET
C/ Cometa nº 5
Cierra domingo y lunes
Estuve comiendo en pleno ferragosto, casi vacío.
Muy bueno el tartar de tomate con anguila, yo le hubiese puesto algo más de angula que es la gracia del plato pero comprendo que quizás para alguno fuese demasiado fuerte.
Hace tiempo que no comía pichón y este me supo a gloria en el punto que
lo pedí, rosado y con todo lo que ha de tener.
Servicio correcto quizás podían haber estado un poco más cercanos incluido el
cocinero que estaba a la vista y del que éramos casi los únicos parroquianos pero ya se sabe que a un restaurante se va a comer.
Buena experiencia
Armando es muy reservado.Es su carácter…