13 comentarios el “CABALLA CANALLA

  1. Bienvnido al mundo real… 🙂

    Tiene sus ventajas ,,, Por ejemplo «no tener que escuchar el rollo de quién está detrás del negocio»… però también tiene sus inconvenientes. Yo los sufrí en Carmelitas, por citar un ejemplo reciente i tu bién que los comentes en este post.

    Pero puestos a elegir, me quedo con las ventajas… 🙂

    Saludos!

  2. Me gusta mucho sentarme en los restaurantes nuevos, sin invitación de la agencia de comunicación, sin oír explicaciones sobre quién está detrás del negocio, sin las atenciones de los propietarios y del servicio de sala. Algunos diréis que sólo de esta manera se consigue llegar a conocer la realidad. Digamos que es otra manera de aproximarse a un restaurante.
    Digamos que es la única donde la experiencia es honesta.
    Digamos que se debe pagar la cuenta.
    Por cierto las albondigas también te las cobraron ;((

    • Los lectores saben que pagar o no pagar no es un problema para mi. Y no hago ninguna diferencia. Ya he hablado de esto en varios momentos. Me he gastado sólo en restaurantes viajes gastronómicos y eventos más que la mitad de los blogueros de Barcelona juntos…
      Las albóndigas se han cobrado en lugar del cochinillo.

  3. Philippe el nivel gastronómico de la Barceloneta y el Born baja a la misma velocidad a la que aumentan los visitantes. Vivo en el barrio y aún no he descubierto un restaurante digno (lejos queda la excelencia) para cena sin pretensiones o uno excelente para la cena excepcional. Un drama.

      • La Mar Salada aprueba aunque el último arroz que comí allí estaba pasado punto y medio. Sagás tiene algunos bocatas dignos (y caros) pero las novedades de su carta son, casi todas, puro despropósito (en especial su bocadillo de calamares).

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